lunes, 6 de diciembre de 2010

Muffins de jengibre y naranja

Aprovechando que estoy descansando mucho estos días me ha dado hoy por ponerme a hacer magdalenas, o muffins, que es el nombre pijo y prepotente que está tan de moda ahora (aunque mola decir muffin, igual que mola decir björk xD).




El caso es que como el otro día compré jengibre he estado mirando qué cosas hacer con él, así que me puse a buscar recetas. He encontrado esta receta; el problema es que no tenía limones pero sí naranjas, así que decidí experimentar. Además, tampoco tenía margarina, así que lo sustituí por aceite.


Comentar además que la receta está en inglés americano, así que he aquí algunas conversiones al sistema métrico:

  • 375ºF = 190ºC
  • 1 "taza" de harina = 140 gramos de harina aproximadamente. Yo uso un vaso normal de agua para esta medida, hoy lo he comprobado con un medidor y más o menos coincide.
  • Lo mismo con el azúcar.
Y sin más preámbulos, pasemos a la receta. Ingredientes:

  • 2 huevos
  • 1 yogur griego
  • La ralladura de una naranja
  • 1/4 de taza de azúcar
  • 3/4 de taza de azúcar
  • 3 tazas de harina
  • 10 cucharadas de aceite de oliva
  • una cucharada de levadura
  • media cucharada de sal
  • media taza de jengibre fresca, pelada y cortada en trocitos
Precalentar el horno a 190º.
Mezclar en un bol la harina, la sal y la levadura. Reservar.
Mezclar la jengibre, la ralladura de naranja y el 1/4 de taza de azúcar. Batirlo en la batidora hasta hacer una pasta homogénea. Reservar.
En un bol, mezclar las 10 cucharadas de aceite de oliva y los 3/4 de taza de azúcar. Batir hasta conseguir una pasta. Añadir un huevo. Cuando esté totalmente incorporado a la mezcla, añadir el otro y repetir el proceso. Incorporar un tercio de los ingredientes secos hasta conseguir una pasta. Cuando esté incorporado, añadir un tercio del yogur. Añadir otro tercio de ingredientes secos, incorporar y añadir otro tercio del yogur. Repetir el proceso hasta terminar tanto los ingredientes secos como el yogur.


Engrasar los moldes con aceite de oliva y añadir masa como hasta la mitad más o menos. Meter en el horno alrededor de media hora, aunque dependerá del tamaño del molde. Yo no tengo moldes de magdalenas así que he usado boles pequeños, pero son enormes así que he tenido que ponerlas cosa de una hora larga en el horno.


Una vez se hayan hecho, mientras se enfrían, hay que cubrirlas con el glaseado:

  • Una taza de azúcar glas (usar una taza de azúcar, batirla y voi-la!)
  • Un zumo de naranja (aprovechar la naranja de la ralladura).

Seguramente sobre zumo porque la idea es que el glaseado quede bastante espeso, pero lo suyo es que el azúcar no "se vuele". Si sobra zumo, bébetelo como premio :D
Con una cuchara y con un dedo excepcionalmente limpio, añadir el glaseado generosamente sobre las magdalenas. Como absorberán bastante líquido, repetir el proceso.


Y ya está :D
Por cierto, están buenísimas. Saben dulces y picantes :D
Y si alguien quiere una camiseta que refleje su adoración por estas magdalenas gigantes tamaño Primigenio, aquí hay una.

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